Visitar a las madres y abuelas para agasajarlas en el Día de la Madre siempre ha sido una costumbre familiar; sin embargo, la pandemia del covid-19 nos obliga, por segundo año consecutivo, a restringir los encuentros sociales para evitar poner en riesgo a quien nos dio la vida.

Luis Pampa, médico infectólogo del Instituto Nacional de Salud (INS), del Ministerio de Salud, afirmó que incluso tras recibir la vacuna contra el covid-19 ellas no pueden ser visitadas porque el riesgo de contagio sigue latente hasta que se logre un gran porcentaje de inmunización en adultos mayores y adultos. 

«Si nuestra madre o abuela recibe la primera dosis esta semana, significa que la vacuna recién tendrá efecto entre dos a tres semanas después de la inoculación. Además, los adultos mayores constituyen un grupo de riesgo.», indicó el experto en diálogo con la agencia Andina.

El especialista detalló que el riesgo persiste incluso si pasó un mes de la vacunación ya que, anotó, si bien la vacuna Pfizer es una de las mejores, su efectividad frente al Sars-Cov-2 alcanza el 95%; es decir, de cada 100 personas vacunadas 5 desarrollarán la enfermedad y una de ellas “puede ser mi mamá o mi abuela.”

Recordó que diariamente fallecen 200 o 300 personas por covid-19 en el Perú. «Los difuntos ya nunca más van a encontrarse con sus familias. Para cada familia en duelo, las estadísticas no sirven; aunque solo sea un fallecido, el daño es irreparable”.

En Navidad y Año Nuevo, recordó, hubo un aumento de casos que originó la segunda ola del coronavirus entre enero y febrero. Esto fue a raíz de la migración entre regiones y el ingreso a la vivienda de personas ajenas al núcleo familiar.

“Sabemos por costumbre que se suele visitar a la familia, pero en este contexto de pandemia eso debe quedar relegado (…). Si nosotros visitamos a nuestras madres o abuelas, definitivamente se dará el escenario de que podemos llevarles el virus”.

Otros factores a considerar

Pampa señaló que, en caso de vivir con nuestras madres o abuelas, es necesario mantener una burbuja familiar alrededor de ellas porque suelen ser mayores de 60 años y tener hipertensión, diabetes y/o algunas otras enfermedades, que las hacen más vulnerables frente al covid-19. 

Así también existe una diversidad de variantes, advirtió. Por ejemplo, ya está descrito en estudios epidemiológicos que la variante brasileña tiene el doble de tasa de infección  que la variante primigenia de Wuhan. “Eso hace que si hubiera una infección domiciliaria, probablemente casi todos los familiares estarían en riesgo de contagio, incluyendo la mamá”.


Es necesario ser estrictos en este contexto, dijo, porque esta serie de factores nos hace caer en la conclusión de que no se tienen que llevar a cabo las visitas ni a las mamás ni a las abuelas, que ese es el mejor regalo que les podemos dar. “Yo creo que las decisiones tienen que ser racionales, basadas en evidencia, para no exponer a nuestras madres”.

Videollamadas y delivery

Luis Pampa recomendó valerse de otras herramientas para agasajar el Día de la Madre y así evitar visitarlas si no vivimos en la casa. “No tenemos que exponerlas innecesariamente a la covid-19”.

Para comunicarnos con ellas y saber cómo están, podemos disponer de una serie de herramientas tecnológicas, llamadas por videoconferencias, zoom, WhatsApp, etc. Así también hay una serie de servicios de delivery para enviar regalos, presentes y demás cosas de una forma totalmente segura.

Fuente: Agencia Andina

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