Más de 300 pobladores en Satipo recibieron servicios sociales en campaña multisectorial.
Con el objetivo de hacer efectiva la presencia del Estado en zonas de difícil acceso, más de 300 pobladores de cuatro comunidades asháninkas en la provincia Satipo, Junín, recibieron servicios médicos, educativos y sociales, durante la campaña multisectorial que realizó el Programa Nacional PAIS del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) a través del Tambo Potsoteni.
Familias de las comunidades nativas Tziquireni y Pitziquia del distrito Río Tambo, y Potsoteni y Tabecharo del distrito de Pangoa, ubicadas en la cuenca del río Ene, acudieron desde temprano al Tambos, para recibir atenciones en medicina general obstetricia, orientación nutricional y psicología. Además, fueron vacunados y pasaron por el descarte de la tuberculosis, priorizando la atención de niños y adultos mayores.
Con apoyo del registrador del Reniec, las comunidades realizaron diversos trámites del documento de identidad, tales como la renovación por caducidad o el duplicado ante casos de pérdida. Paralelamente, se realizó el empadronamiento de hogares para actualizar su clasificación socioeconómica y acceder a los diversos programas sociales del Midis.
Por su parte, estudiantes de los últimos años de secundaria participaron en talleres educativos, donde conocieron sobre el acceso a becas de estudio y los créditos estudiantiles que se brindan a través del Pronabec.
Finalmente, para promover los derechos de niñas, niños y adolescentes se brindó orientación a los miembros de las comunidades nativas y charlas de conciliación, para resolver conflictos originados a causa de la violencia familiar.
“El desarrollo de esta campaña permitió acercar más de 800 atenciones de diferentes entidades del Estado a familias asháninkas. En este trabajo, el Tambo cumple un rol clave, ya que identifica las necesidades de compatriotas y gestiona que estos servicios lleguen hasta este lugar”, indicó Deisy Vilcampoma, coordinadora del Programa PAIS en Junín.
Esta campaña multisectorial contó con apoyo del municipio distrital de Mazamari y la participación de entidades como la Dirección Regional de Salud de Satipo, la Defensoría del Pueblo, Pronabec, Reniec, la Defensoría Municipal del Niño y del Adolescente, entre otras entidades.