Guardianes del Señor de Qoyllur Riti salen a las calles del distrito de San Jerónimo para imponer orden.
Los ukukus (osos en quechua), los míticos personajes de la festividad del Señor de Qoyllur Riti de Cusco, salieron a las calles del distrito cusqueño de San Jerónimo para imponer el orden y la disciplina ante el incumplimiento del aislamiento social obligatorio decretado por el Gobierno para frenar el avance del coronavirus (covid-19).
Los conocidos como pablitos, agregaron un barbijo y guantes a su traje habitual, para sumarse a la labor que cumplen la Policía Nacional y el Ejército del Perú en la prevención para evitar la propagación del coronavirus en Cusco.
Estos personajes se ubicaron en los exteriores del mercado mayorista Vinocanchón, la prolongación de la avenida De La Cultura, donde atienden entidades bancarias, y principales calles invadidas por ambulantes. Allí armados con zurriagos y huaracas sensibilizaron a los pobladores a respetar el aislamiento social.
Los cerca de 20 ukukus no permiten las aglomeraciones, el paso de personas en grupo y obligan al distanciamiento social de metro y medio, el uso de la mascarilla, y ante la reacción de algún irreverente los azotan de forma simbólica.
Para acelerar el paso de ciudadanos expresan “jayo”, término utilizado en el peregrinaje al Señor de Las Nieves, y aquel que se resista recibe el mensaje con la muestra de los zurriagos “aquí hay pan caliente de tres sabores”.
La festividad en honor al Señor de Qoyllur Riti, sus actos culturales religiosos, fue declarada Patrimonio Cultural de la Nación en el 2004 y Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco en el 2011. Lamentablemente este año no habrá peregrinación como medida de prevención ante el avance del coronavirus.
Los ukukus son personajes míticos de la cosmovisión andina. Ellos se encargan de cuidar el orden y disciplina en las festividades tradicionales, como la del Señor de Qoyllur Riti. Durante el peregrinaje ellos cuidan la caminata y que los visitantes respeten los lugares sagrados del nevado.
En la comunidades andinas ellos son considerados autoridades del orden y ahora ellos han salido a apoyar a las fuerzas del orden con la disciplina en Cusco, y nadie les reclama porque simbolizan la tradición andina.
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