Un mal proceso constructivo, como quemado de las tuberías, falta de mantenimiento o deterioro por antigüedad; así como el uso de productos de mala calidad o empalmes defectuosos son algunas de las causas más comunes de fugas de agua en las viviendas, por la informalidad en sus construcciones.
Para identificarlas es importante advertir si hay un aumento en el costo del recibo de agua, si aparecen manchas por humedad en paredes y techos o si se desprende la pintura de estas.
Los lugares más comunes donde aparecen las fugas de agua son las cocinas y los baños. Si no se usan tuberías y materiales adecuados y compatibles, se puede afectar la inversión realizada en una vivienda.
Dentro del proceso constructivo o durante las reparaciones se deben efectuar pruebas hidráulicas a fin de comprobar que la instalación esté bien realizada, para evitar futuras fugas en las edificaciones, recomienda Pavco Wavin, empresa de productos para sistemas de agua y saneamiento.
Usar tubos y accesorios que cuenten con controles de calidad exigentes son una garantía para la tranquilidad de las familias. Los productos fabricados con alta tecnología, evitan daños a las estructuras y acabados, a los sistemas eléctricos de las viviendas y a las paredes de los vecinos.
De esta manera no se afecta la economía de las familias, pues la reparación o reposición de tuberías puede ser costosa, ni la salud, por la humedad generada a causa de las fugas de agua.
Es recomendable adquirir materiales para las instalaciones interiores de la vivienda, que las tuberías cuenten con garantía de producto y que las personas accedan a un servicio de posventa que les permita asegurar el correcto funcionamiento de estos sistemas.