Cambie su cepillo cada dos meses. Pasado este tiempo, pierde eficacia para eliminar sarro.
- Lávese los dientes al menos tres veces al día, con una duración de entre tres y cinco minutos. Hágalo después de cada comida, especialmente si ha ingerido alimentos altos en azúcares y carbohidratos. Una buena técnica de cepillado no solo incluye los dientes, también la lengua y las encías para eliminar la placa bacteriana.
- Utilice hilo dental por lo menos una vez al día para eliminar cualquier residuo de comida que haya quedado entre los dientes.
- Para ello retire de 45 a 60 cm de hilo dental del dispensador. Luego enrolle los extremos del hilo en sus dedos índice y medio. Finalmente, sujete el hilo con firmeza alrededor de cada diente.
- Mueva el hilo hacia adelante y hacia atrás empujando de arriba hacia abajo contra el lado de cada diente. Hágalo con delicadeza; si emplea la fuerza, podría lastimarse.
- Complemente la limpieza con un enjuague bucal sin alcohol para combatir las bacterias que produzcan el mal aliento. No es necesario emplear este producto todos los días, hágalo cada vez que lo considere indispensable o cuando su dentista se lo prescriba.
- Cambie su cepillo cada dos meses. Pasado este tiempo, pierde eficacia para eliminar sarro, placa bacteriana y cálculos dentales. Acondiciónelo al tamaño de sus dientes.
Fuente: Diario El Peruano