A nivel de la región Cusco, el protocolo de atención, tiene sus propias características que garantiza una adecuada y transparente inoculación mediante la implementación de un aplicativo, único en el país.
Se cumplen los siguientes pasos:
- El adulto mayor llega a un punto de vacunación. La enfermera evalúa su temperatura y pulso. En forma inmediata, registra su documento nacional de identidad (DNI) en un sistema de lector de código de barras ingresando a un sistema automático de control.
- Antes de que se inicie la vacunación, el vacunador debe mezclar el diluyente con el frasco (vial) de la vacuna de PFIZER. Este es el paso previo y se realiza antes de que llegue la persona a inmunizar. En él, el encargado toma con una jeringa 1.8 mililitros del diluyente, lo coloca en el frasco y mezcla.
- Cada frasco de PFIZER contiene seis dosis que serán inoculadas al mismo número de personas.
- El frasco debe mantenerse a una temperatura de entre 2 y 8 grados centígrados mientras lleguen las personas a vacunar. De acuerdo con el protocolo, la mezcla de la vacuna solo tiene una duración de 6 horas.
- Cuando llega el paciente, el vacunador debe abrir una jeringa retráctil. Cada jeringa es para un solo uso.
- El vacunador debe extraer del frasco de PFIZER solo 0.3 mililitros de la vacuna.
- El vacunador debe mostrar la jeringa con 0.3 mililitros de la vacuna.
- Se limpia el hombro (usualmente el izquierdo)
- Se procede con la vacunación.
La GERESA Cusco informó que, el sistema digital que se aplica en la región cusqueña permite el control estricto de vacunas entre la población. Evitan errores porque el registro de los adultos es preciso y facilita que se haga el seguimiento a los vacunados.
“Permite definir cuándo una persona se vacunó, cuándo pasan los 30 minutos exactos para que inmediatamente puedan ir a sus domicilios”, dijo al respecto el gerente regional de Salud, Juan Alberto Spelucin Runciman.