Considerada una de las manifestaciones religiosas y culturales más importantes de Cusco, la Festividad del Doctor Patrón San Jerónimo congrega a fines de setiembre de cada año a una multitud de fieles que le rinden culto en una celebración cuya excelsa manifestación de sincretismo religioso y cultural le valió ser declarada en 2016 Patrimonio Cultural de la Nación.
Al igual que las apoteósicas celebraciones del Corpus Christi, el Señor de Qoyllur Riti, el Señor de los Temblores, la Virgen de Paucartambo y el Señor de Huanca, que también son Patrimonio Cultural de la Nación, la Festividad del Doctor Patrón San Jerónimo es sinónimo de identidad cusqueña y exhibe una tradición religiosa de gran riqueza simbólica y ritual.
Esta emblemática festividad volvió a celebrarse después de dos años de suspensión debido a la emergencia sanitaria por la pandemia del covid-19. En los cuatro días de festejos, desde el 27 hasta hoy, 30 de setiembre, cientos de devotos se dieron cita en el distrito de San Jerónimo para participar de las diversas actividades programadas. Estas incluyeron la entrada triunfal de la venerada imagen en la remodelada plaza de armas, misas, romerías, procesión por las principales vías de la ciudad, desfile cívico y folclórico, así como fuegos artificiales.
San Jerónimo es uno de los ocho distritos que conforman la provincia del Cusco, en el departamento del mismo nombre. Se encuentra ubicado a aproximadamente ocho kilómetros de la Ciudad Imperial y es conocido como unos de los distritos que forman parte del llamado “Valle sur” cusqueño, por su ubicación en la zona sur de esta provincia.
Origen de la festividad
Jerónimo de Estridón, declarado santo y llamado entonces San Jerónimo, fue proclamado en el año 1295 como Doctor de la Iglesia Católica, rango superior entre los santos de esta institución religiosa, que se le otorgó por su erudición y por realizar aportes para la reflexión espiritual y la doctrina de la fe, específicamente por los estudios que realizó de las Sagradas Escrituras y por traducir la Biblia del griego y el hebreo al latín. Es por esta razón que, en el distrito de San Jerónimo del Cusco, a la imagen de su Santo Patrón la denominan Doctor Patrón San Jerónimo.
Según el expediente que sustenta la declaratoria como Patrimonio Cultural de la Nación, en el año 1570 se funda en el distrito de San Jerónimo la parroquia de San Jerónimo, como parte de la instauración de las llamadas reducciones y del proceso de evangelización católica propio de la época colonial.
Primero se construyó una pequeña ermita y luego la llamada Iglesia Menor de San Jerónimo, la cual está asociada a lo que fue el territorio de una panaca inca, lugar donde habitaban los descendientes del soberano del Tahuantinsuyo.
Imagen de San Jerónimo
La venerada imagen del Doctor Patrón San Jerónimo del Cusco se encuentra en la Iglesia Menor de San Jerónimo, principal iglesia del distrito que se ubica en la plaza de armas del mismo. Esta imagen, elaborada con madera, yeso, fierro y cuero de vaca, mide más de dos metros y representa a un hombre de contextura fornida, de aproximadamente 70 años, que lleva una protuberante barba y viste un sombrero grande de color rojo, un vestido de seda blanca que va encima de un vestido rojo más largo y un poncho rojo.
Asimismo, cuelga en su cuello una cadena con una cruz y encima de todo lleva una capa grande de color rojo en cuya espalda van bordados los nombres de la pareja de mayordomos que donaron dicha indumentaria. La imagen lleva en las manos guantes rojos; en la mano izquierda porta una Biblia que está sobre una pequeña escultura de una iglesia, como símbolo de los aportes de San Jerónimo a la labor evangelizadora, y en la mano derecha una pluma de oro, la cual simboliza su título de Doctor de la Iglesia.
Festividad
La festividad del Doctor Patrón San Jerónimo se celebra una vez al año y tiene una duración de cuatro días, del 27 al 30 de setiembre, siendo este último el día central. La imagen del Patrón San Jerónimo sale de su iglesia en procesión dos veces al año, para participar de las fiestas cusqueñas del Corpus Christi y para su festividad patronal en el distrito de San Jerónimo.
La organización de la festividad está a cargo de los mayordomos, llamados “carguyoq”; la Hermandad de Caballeros del sector izquierdo; la Hermandad de Caballeros del sector derecho; representantes de la parroquia de San Jerónimo y de la Municipalidad Distrital de San Jerónimo; y la Asociación de Danzas Folclóricas de San Jerónimo, que agrupa a todas las comparsas que participan en la festividad. Ellos se reúnen con semanas de anticipación para establecer acuerdos respecto a la organización de las actividades festivas.
El desarrollo de la celebración es responsabilidad de los mayordomos o “carguyoq”, cargo que suele ser responsabilidad de una pareja de esposos comprometida por fe y devoción a colaborar con lo necesario para la realización de la festividad. En esta fiesta hay un carguyoq mayor o central, que debe haber nacido en San Jerónimo y tiene a su cargo la donación de la vestimenta a la imagen del Doctor Patrón San Jerónimo para su fiesta, así como la celebración de la misa central en honor al Santo Patrón.
Además, durante los cuatro días de la festividad el carguyoq central tiene que dar a sus hurk’ados (personas que le dan aportes para la fiesta y que pueden ser amigos, familiares y devotos) desayuno, almuerzo y cena para adquirir así reconocimiento social y estatus entre la población como el principal colaborador de la celebración.
El distrito de San Jerónimo se encuentra dividido en dos sectores, llamados en lengua quechua “paña”, que significa derecha y “lloque”, que significa izquierda. La división territorial de lloque y paña en el distrito de San Jerónimo data desde mucho tiempo atrás, pues según los lugareños una calle peatonal que desemboca en la plaza, frente a la iglesia de San Jerónimo, llamada Pasaje Santa Rosa, es la que separa la parte de arriba del distrito, que sería el sector lloque o izquierda, y la parte de abajo, que sería paña o derecha. Esta segmentación proviene de la antigua tradición dual andina, expresada en la división espacial y mítica “Hanan” y “Hurin” o mundo de arriba y mundo de abajo, respectivamente; en la cual la dualidad es entendida como una complementariedad propiciatoria entre partes opuestas.
Para el caso de esta tradición religiosa festiva, esta dualidad complementaria entre lloque y paña hace posible la realización de la celebración más importante del distrito, ya que esta división se expresa en determinados elementos de la fiesta que se ubican en cada uno de estos sectores, como también en la organización de la festividad. Tal es el caso de la Hermandad de Caballeros del sector derecho y la Hermandad de Caballeros del sector izquierdo, las cuales, turnándose entre las dos, una cada año, se encargan de cargar el anda con la imagen de San Jerónimo durante algunas de las procesiones, así como cuando les corresponde en su año, de proteger la imagen del Santo Patrón y supervisar sus desplazamientos. Además, los integrantes de cada hermandad deben tener sus domicilios en el sector al que pertenece su asociación.
En los días de la festividad se desarrollan diversas actividades en honor a San Jerónimo, empezando con la llamada “entrada”, para lo cual los integrantes de las comparsas se reúnen al medio día en casa de su respectivo carguyoq. Luego, las comparsas se dirigen hacia el campo deportivo de Cajonahuaylla, desde donde se inicia un pasacalle, presidido por las autoridades locales, seguidas por el carguyoq central, sus hurk’ados y las diversas comparsas, cada una acompañada de su respectivo carguyoq, y recorren las principales calles del distrito hasta llegar al interior de la iglesia de San Jerónimo para saludar a la imagen.
Luego las comparsas se ubican en determinados lugares dispuestos para cada una de ellas en los alrededores de la plaza, donde comen, bailan y beben acompañadas de sus bandas de músicos, familiares y demás invitados. Estos espacios designados para cada comparsa son reservados, no pueden acceder a ellos personas ajenas a la comparsa y esto es respetado por todos los devotos.
El día central de la festividad, empieza con la “Misa de gallo”, a las 4 y 30 de la madrugada; y luego la “Misa de Fiesta”, a las 10 de la mañana; ambas ceremonias litúrgicas celebradas en el templo de San Jerónimo.
Al término de la última misa y a partir de las 11 de la mañana empieza la procesión del Santísimo Sacramento, y una hora después, al mediodía, tiene lugar la llamada “Procesión triunfal” de San Jerónimo por las principales calles del distrito para bendecir a la feligresía que lo acompaña.
La festividad en honor de San Jerónima finaliza con la “Transferencia de demandas de mayordomía central y comparsas”, en el atrio del templo, y el tradicional “Kacharpari” o fin de celebración con un pasacalle por las calles del distrito y que culmina en la plaza de armas.
Chiriuchu y ponche de habas
En la festividad en honor de San Jerónimo se acostumbra a degustar el tradicional plato típico cusqueño conocido en quechua como Chiriuchu, que en castellano significa “ají frío” o “picante frío”.
Este sabroso potaje consiste en un plato frío compuesto por diversos ingredientes tales como algas; huevera de pescado; cuy al horno; torreja de harina de maíz; tripa de cuy rellena de papa picada, vísceras y sangre del animal, todo lo cual es cocido al horno y recibe el nombre de “tullan” que en castellano significa relleno; carne de gallina; chalona o cecina de cordero; morcilla; queso; maíz tostado y rocoto.
Por la noche la población sale a la plaza del distrito para apreciar los fuegos artificiales y es tradición compartir el tradicional “Ponche de habas”, muy común en los pueblos el Ande, que consiste en una bebida elaborada a base de habas molidas, azúcar, clavo de olor y canela. Para el que desea combatir el frío, se le agrega un preparado de cañazo con ayrampo, fruto de un cactus parecido a la tuna, de color rojizo y sabor dulce que posee propiedades medicinales como regular la presión sanguínea y bajar la fiebre, entre otras.
Danzas de la festividad
A partir del año 1940, de manera paulatina, se integran en la Festividad del Doctor Patrón San Jerónimo diversas comparsas de danzas andinas tradicionales, cada una de las cuales representa a personajes específicos que con sus atuendos, música, coreografía y performance narran diferentes historias, las cuales no necesariamente tienen una relación directa con la imagen del Doctor Patrón San Jerónimo, pero sus integrantes, motivados por su fe y devoción, realizan el baile en su honor con la esperanza de redimir sus pecados y pedirle algún favor.
Las comparsas de danzas que participan en esta festividad son, entre otras, las siguientes: Majeños; Qhapaq qolla; Saqra; Contradanza; Mestiza qoyacha; Qhapaq negro; Qollas menores; Saqra león; Siklla; Aucca chileno; Machu Chucchu Tusuy; Pasña qoyacha; Kachampa y Panaderos.
Patrimonio Cultural
El Ministerio de Cultura declaró, el 23 de mayo de 2016, Patrimonio Cultural de la Nación a la Festividad del Doctor Patrón San Jerónimo de Cusco, en mérito de la combinación de elementos ancestrales andinos y occidentales europeos, en la cual el legado prehispánico, expresado de diferentes formas, perdura significativamente y se refleja, a su vez, en la forma de vida de la población.
La estructura y la organización festiva constituyen un reflejo de la forma de vida de este pueblo cusqueño, de los principios que rigen su cotidianidad y la manera cómo se configuran sus relaciones humanas. A partir de esta tradición, se mantienen elementos prehispánicos vigentes, vinculados a una organización espacial y social bajo formas y principios ancestrales, que son un importante referente de su identidad.